Saturday, December 10, 2011

SOBRE LAS EDICIONES DE SERVICIO SECRETO

Vimos en la entrada anterior las diferentes ediciones del primer número de la edición española de Doc Savage, algo de lo que prácticamente no se ha hablado.

Ahora veremos otra curiosidad.

La colección SERVICIO SECRETO de Bruguera nació en 1950 y todo parece indicar que fue un éxito desde sus primeros tiempos. ¿Pero ese éxito fue suficiente para justificar más de una edición del mismo título? No sería descabellado, la serie F.B.I. de Rollán, sí que anunció diferentes ediciones de más de un título.

En cualquier caso, no conozco ningún ejemplar de SERVICIO SECRETO que indique una segunda, o posterior, edición. Pero sí he descubierto una curiosidad.


Tomemos la novela LA PEQUEÑA TONKINESA, el número 34 de marzo de 1951 de la colección. Y si vemos la página 1 de dicha novela encontraremos la típica portadilla utilizada en aquellos momentos.


Pero si tomamos otro ejemplar nos podemos encontrar con esto

Una edición con una página 1 diferente de la anterior. ¿Son diferentes ediciones o son la misma con el error corregido sobre la marcha? Ni idea. Si efectivamente existieron como mínimo dos ediciones de esta novela ¿Cuál fue la primera? De nuevo no lo sabemos, pero si tuviera que elegir una, me quedaría con la del error.

Thursday, December 08, 2011

LAS EDICIONES DE DOC SAVAGE

Hasta ahora cuando hablamos de las ediciones de Doc Savage siempre nos hemos quedado con la distinción entre las ediciones españolas y argentinas. Distinción no sólo lógica sino práctica dada las características de ambas ediciones. Pero si nos adentramos en las ediciones españolas podemos encontrar cosas muy interesantes, casi, casi como para escribir una trama como la de El Club Dumas de Pérez-Reverte.

Vamos a ello. Supongamos que usted consigue lo que vamos a denominar la Copia A de la edición española de la primera novela de Doc Savage. En esta copia veremos lo siguiente:


la cubierta conocida por todos.



La primera página de la tripa donde vemos el nombre original del pseudónimo, Kenneth Roberts y que se cambió por parecerse demasiado al nombre del novelista, muy famoso en aquella época, Kenneth Robertson.


La segunda página de la tripa donde se indica que es primera edición.


La página 95 donde se anuncia la próxima novela del personaje.



La página 96 que es un anuncio de la archifamosa Biblioteca Oro.



Y por fin la contra, donde se anuncian las próximas entregas de Hombres Audaces.


Hasta aquí, nada nuevo. Pero si tomamos un ejemplar que llamaremos Copia B, nos encontraremos una copia en apariencia igual, con idéntica cubierta pero con...


...la primera página con el nombre correcto...



...la segunda página con la leyenda de 1ª edición pero con el añadido de la lista de las cinco primeras entregas de la serie...



...la página 95 sin el anuncio de la próxima novela...




...la página 96 con un anuncio diferente...





...y un listado de contra también diferente.



¡Vaya! Parece que tenemos dos ediciones diferentes. ¿Seguro? Si tomamos un ejemplar que llamaremos Copia C, de nuevo nos encontraremos una copia en apariencia igual, con idéntica cubierta pero con...



...una página 95 diferente a las de las Copias A y B (compárense las primeras líneas)...





...una página 96 diferente a la de la Copia B (nótese que en este anuncio aparece el precio de los libros)...


...una contra diferente a la de la Copia B (nótese que el cambio de colores).



Vaya, tenemos tres ediciones diferentes. O no. Si tomamos (sí, lo han adivinado) la Copia D nos encontraremos con:


... que tiene el anuncio de la página 96 diferente (nótese que aquí no se indica el precio pero sí los datos de la venta en Madrid).


Así que ya vamos por la cuarta edición diferente. ¿Habrá más? No lo sé, pero cuatro no me parecen pocas. Y ¿cuál es la primera de verdad? Creo que podemos aventurar que la Copia A es la primera edición, ya que es la que aparece con el pseudónimo original que pronto fue cambiado.

Soy consciente de que todo esto no sirve para nada, pero al menos casi, casi, uno se siente un personaje de Pérez-Reverte ;-)

Tuesday, June 07, 2011

Jaume Ministral Masià: 100 españoles y Franco



En febrero de 1979 apareció el libro 100 ESPAÑOLES Y FRANCO escrito por José María Gironella y Rafael Borràs Betriu. En plena transición, 100 españoles representativos (o no, eso siempre depende del criterio de cada uno) contestan un cuestionario que especifica la postura de cada uno de ellos ante la figura del General Franco. Y entre ellos se encontraba Jaume Ministral Masià, lo cual dice mucho de la consideración que algunos, supongo que muchos, le tenían. Lo primero que llama la atención es que se presenta como maestro, así a secas. Actitud que no sólo le honra sino que le define. Coordinó enciclopedias, creó series de TV, escribió obras de teatro de éxito, revolucionó (inadvertidamente, eso sí) la novela policíaca española, escribió algunos de los mejores libros en catalán de la segunda mitad del siglo XX…Y él se denominó simplemente maestro. Bueno, su ideario ya lo dejó claro en su NOSALTRES, ELS MESTRES.
Volviendo a 100 ESPAÑOLES Y FRANCO, Ministral se centra en su visión como maestro y ofrece un retrato lúcido, razonado, nada extremista pero muy crítico con Franco, su régimen y el apoyo que la iglesia católica le dio a ambos siempre desde el punto de vista de la educación. Es muy sintomática la anécdota que cuenta de su visita al palacio de El Pardo después de la muerte del dictador. Al terminar la visita Ministral preguntó por la biblioteca y el guía replicó “En el palacio de El Pardo no existía biblioteca, señor”. Demoledor. Y repito, muy sintomático.
Más allá de la anécdota, sus respuestas son un documento muy importante para entender la figura de Ministral. Cuánto me gustaría tener algo parecido de Debrigode…

Sunday, June 05, 2011

Jaime Ministral Masià: La revista ¡TURURUT...!

El 31 de enero de 1953, unos dos años antes de la publicación de la revista LOCUS, apareció en los kioscos ¡TURURUT...! (expresión popular que indica negación o burla, muy común en Cataluña), una revista de humor destinada a dar un poco de color a la triste sociedad de aquel tiempo con un carácter claramente catalán quizá para diferenciarse de otras propuestas como LA CODORNIZ. Grande, con un tamaño de 20, 5 x 28, 3 cm. aprox. (casi un DIN-A 4 ), 16 páginas de tripa y cubiertas a dos tintas. La filosofía de la revista quedaba clara en su carta de presentación:




El título de nuestro recién nacido semanario, que es el suyo, ha sido anunciado hoy, en distintos tonos de voz, por los vendedores ambulantes. Intrigado usted ante la aparición de una seria revista humorística, quiso conocer privadamente a ¡TURURUT…! y ha buscado en sus bolsillos tres rubias naturales del Banco de España o tres arrugados billetes de la última clase social, efectuó una pequeña transacción comercial con nuestro representante cultural, y ¡TURURUT...…! ha pasado a las manos de usted señora, señorita, caballero o infante de la era pre-atómica… con regocijo y optimismo.
¡TURURUT…! agradecido por el sacrificio que representa para la economía de su hogar, este pequeño desliz financiero, le saluda como hacen los buenos amigos, a la par que le cuenta el último chisme y el chisme postrero. Porque:
¡TURURUT…! es un semanario humorístico de actualidad.
¡TURURUT…! cuenta los mejores reyes del chiste.
¡TURURUT…! es fruto del cerebro de originales humoristas.
¡TURURUT…! quien gimiere… ¡habrá “rebut”!
Que son razones lo suficiente importantes para que ésta sea la revista que le ayude a pasar agradablemente el fin de semana.
Y recuerde que ¡TURURUT…! se puede leer antes o después de las comidas, ya que tiene una fuerte dosis de “H.U.M.O.R.”, que abre el apetito o facilita la digestión, según los casos-
LA DIRECTIVA




El elenco de colaboradores no podía ser mejor. En el apartado literario, entre otros, destacan Armando Matías Guiu (hilarante escritor conocido entre otras cosas por sus Diálogos para Besugos para la Editorial Bruguera), Noel Clarasó (famosos por sus libros de humor) y Luis G. de Blain (famoso por su trabajo en la radio) al que en breve se uniría el prestigioso crítico y periodista Luis Marsillach. Y en el apartado gráfico Opisso, Conti, Peñarroya, Escobar, Muntañola, Martz Schmidt, Tinet, Coll, etc. Sin olvidar a Cesc que además fue su fundador y, según parece, ideólogo. Resumiendo, un elenco absolutamente inigualable.
Jaime Ministral se encargó de una de las secciones más curiosas de la revista. Dado que hablar de la política interior podía resultar muy peliagudo (por no decir peligroso), en el semanario se decidió por reseñar la actualidad internacional siempre pasada por un matiz humorístico. Así Ministral se responsabilizó de la sección Fronteras de Tinta donde semana a semana se iba informando al lector de lo que pasaba por un mundo de apariencia casi extraterrestre para el españolito medio de aquella época.




Los trabajos de Ministral fueron:




¡ TURURUT... ! 1 (31 enero 1953) Cambio de pareja
¡ TURURUT... ! 2 (7 febrero 1953) Pánico en la medicina
¡ TURURUT... ! 3 (14 febrero 1953) La VII flota se retira
¡ TURURUT... ! 4 (21 febrero 1953) Historia de Efraim Mosse
¡ TURURUT... ! 5 (28 febrero 1953) El ejército europeo
¡ TURURUT... ! 6 (7 marzo 1953) El expreso de Constantinopla
(Además en este número, escribió el episodio VI (y último) del serial Murieron con los bigotes puestos, de título Terminemos que ya está bien)
¡ TURURUT... ! 7 (14 marzo 1953) J. Vissarionovich ha muerto
¡ TURURUT... ! 8 (21 marzo 1953) El caso de los aviones derribados
¡ TURURUT... ! 9 (28 marzo 1953) Mister Broz visita Londrestr
¡ TURURUT... ! 10 (4 abril 1953) El petardo de Nevada
¡ TURURUT... ! 11 (11 abril 1953) Las preocupaciones de Su Majestad
¡ TURURUT... ! 12 (18 abril 1953) Ofensiva de Paz
¡ TURURUT... ! 13 (25 abril 1953) Corresponsales de Prensa
¡ TURURUT... ! 14 (2 mayo 1953)El embrollo de Indochina
¡ TURURUT... ! 15 (9 mayo 1953) Los turistas desembarcan en España
¡ TURURUT... ! 16 (16 mayo 1953) Noticias crónicas
¡ TURURUT... ! 17 (23 mayo 1953) El Canciller regresa a su casa

En el número 17 Cesc dejó la revista y ésta cambió levemente de orientación y aspecto gráfico. Y la colaboración de Ministral cesó con la marcha de Cesc.
Si bien, y pese a su evidente calidad, esta no deja de ser una parte menor en su obra ¿qué quieren que les diga? Leer a Ministral ilustrado por Peñarroya no es un placer pequeño…

Friday, March 04, 2011

Jaime Ministral Masià: Una curiosidad sobre ¡Vaya Equipo!

Decíamos ayer:

LIBROS JUVENILES
¡Vaya equipo! Editorial Durán. Biblioteca Robinson nº 1. 1946 – J. Ministral Masià
Libro juvenil, la obra más antigua que le conozco, que dentro de su sencillez es delicioso.
(No incluyo la imagen de cubierta ya que mi ejemplar no tiene sobrecubierta)



Pues bien, hace un tiempo conseguí un ejemplar con sobrecubierta.


Un dibujo muy de aquella época, precioso, obra de A. Batllorí Jofré que también se encargó de las ilustraciones interiores. Siendo el número 1 vemos como la Editorial Durán confiaba en Ministral al encargarle la novela que marcaría el tono de la colección.

En la sobrecubierta se indica el precio; 20 pesetas lo que indica que no era un producto precisamente popular pese al nombre de este blog. La edición en rústica, de la que no he visto ningún ejemplar, se ofrecía por 16 pesetas. También se anunciaban los próximos títulos.

Hasta aquí todo correcto y normal. No hay sorpresas. Hasta que encontré el siguiente libro.


Una segunda edición del libro. O no.


Con sobrecubierta también de Batllorí en el interior del libro no se indica que sea una segunda edición que es donde normalmente aparece. Sólo aparece mención en la sobrecubierta.


Me gustaría saber a qué es debido esto porque no es la primera vez que me lo encuentro. En alguna de las míticas novelas de Robert E. Howard de la Editorial Mateu (a las que dedicaré un futuro post) me he encontrado el mismo caso. Mi teoría es que en realidad no es una segunda edición. Son los sobrantes de la primera edición y ya sea porque la sobrecubierta se dañó en la devolución o porque se quería dar la sensación de ser un "nuevo" producto se les ponía una nueva sobrecubierta.


Bueno, más allá del tema de la sobrecubierta, me reitero; una deliciosa novela que en algunos momentos traspasa la barrera de lo "juvenil".


Tuesday, March 01, 2011

Jaime Ministral Masià: La revista LOCUS

El 1 de diciembre de 1955 apareció en los kioscos el semanario LOCUS, un proyecto de revista de humor creada y dirigida por el gran humorista Muntañola. De modesta presencia, a dos tintas, de 24 páginas en papel de periódico y tamaño un poco mayor de una cuartilla (17 x 24 cm.) LOCUS era una fresca propuesta que mezclaba humor gráfico, actualidad cinematográfica y deportiva con textos humorísticos. Su sana intención era traer algo de color a una España gris. Para ello Muntañola contaba con un elenco de lujo tnto de escritores como de dibujantes. Néstor Luján, Josep María Espinás, Sempronio, Cesc, Castanys, Josep María Lladó, etc. son sólo algunos de los que participaron en el proyecto.

Supongo que a estas alturas, y dado el título del post :-), ya imaginarán que en este elenco estaba Jaime Ministral Masià. De hecho hasta aparecía en la cubierta. El humor fino e inteligente de la revista, con textos en catalán casi escondidos, unidos a su espíritu, digamos, libre, hizo que la filosofía de LOCUS no fuera bien entendida por una censura cegata y prepotente que causó innumerables problemas a la nueva revista. Tantos que finalmente un cansado Muntañola decidió tirar la toalla.


Así el número 14, del 1 de marzo de 1956, fue el último de LOCUS. El tono de la revista se puede apreciar en su despedida.



NECROLOGÍA
A la temprana edad de catorce números ha dejado de existir
en nuestra ciudad el joven bromista Don Locus Locus de Locus.
Hijo de un probo bromista barcelonés, el joven Locus se
había hecho querer por cuantos lo trataron -que no eran mu-
chos- y sus virtudes de honradez y claridad le habían granjea-
do las simpatías de unos y las antipatías de otros.
De salud un tanto precaria debido a diversas circunstancias,
una rápida y cruel enfermedad contraída en el cumplimiento
de su deber ha abatido la naturaleza del joven bromista, que
nos ha dejado en el momento en que más necesaria nos era su
presencia. Con el traspaso doloroso del joven LOCUS perdemos
uno de los más genuinos paladines de la broma honesta y vaga,
tan difícil de practicar en estos tiempos, y su muerte habrá de ser
sentida por todos, especialmente los inteligentes, a los que en vida
había dedicado sus afanes.
Reciba su padre, nuestro particular amigo Joaquín Muntañola, el
testimonio de nuestro más sentido pésame, al tiempo que a sus
colaboradores Néstor, Castanys, Martí Farreras, Lladó, Ministral,
Morris, Camarero Audaz y Tinet, que le asistieron hasta sus últimos
momentos, les deseamos resignación y buenos alimentos.


Está claro ¿verdad? Entre líneas se entiende el porqué del final de la revista. Pero al menos en esos 14 números pudimos disfrutar de otra faceta de Ministral, la humorística, que si bien es patente en gran parte de su obra, aquí la destila en estado puro en breves columnas. Fino y elegante, su humor se enmarcaba perfectamente en el estilo general de la revista. Una prueba más de que Ministral no sólo era un escritor de su época sino que era un tanto adelantado a esta. Mucho más tarde, en 1981, Ministral volvió a centrarse en este género en TRAMUNTANA BOJA.

Sunday, February 27, 2011

Jaime Ministral Masià: CONFESSEM-NOS?

Ya he comentado en más de una ocasión que Jaime Ministral es una figura a reivindicar. Escritor de tremenda habilidad y ciertamente reconocido en ciertos ámbitos sobre todo en su Girona natal gracias a su labor como profesor, articulista, guionista de TV, etc., su faceta como novelista nunca ha tenido el reconocimiento que, según mi opinión, merece. En su momento ya manifesté mi admiración por ese delicioso fresco que es CIUTAT PETITA I DELICADA. Pero lo que no me esperaba era encontrar otra obra de esa magnitud en la bibliografía de Ministral. Y la encontré.




CONFESSEM-NOS? (Col.lecció el brot, núm. 7, Editorial Pòrtic, 1980) es una novela difícil de encontrar pese a ser relativamente reciente. No sé, quizá se hizo una tirada pequeña o por alguna razón se destruyeron los sobrantes o lo que sea. La cuestión es que por fin cayó en mis manos. Y sin duda es una GRAN novela. Trenzada a partir de pequeños relatos no necesariamente relacionados entre sí, la multitud de personajes que aparecen nos dibujan la evolución de la sociedad catalana, tanto urbana como rural, desde los años treinta hasta los setenta del siglo pasado. Periodo convulso donde los haya y con un hilo conductor que es el catolicismo, los personajes nos van mostrando sus vidas a través de pequeñas anécdotas que aisladas parecen banales pero que en conjunto adquieren sentido. Y más que eso. Nos muestra de una manera casual como la sociedad ha evolucionado de una manera natural dejando atrás prejuicios y dogmas de un régimen asfixiante y de una iglesia consciente, al menos por algunos de sus miembros, de sus contradicciones.



De estilo fresco y ágil, Ministral se enfrenta al difícil reto de transmitir una historia profunda y coherente a partir de pinceladas poco definidas. Y sale airoso de él sin problemas. No en vano ya llevaba décadas escribiendo y toda esa experiencia acumulada se nota. Vaya si se nota.



Una muestra más del gran talento de Ministral.



Y en breve, más J

Saturday, February 12, 2011